Como deseaba tenerte bajo mi delicada piel, sin prisa, sin miedos. Deseaba besar cada centímetro de tu cuello, tu boca, tu pecho. Deseaba sentirme vulnerable a ti, despojar toda modestia y pudor, para así sentir y tocar a mi antojo esa piel desnuda, esa densa parte de ti, fuerte y sutil, que me hipnotiza y me domina. Como deseaba tener mi corazón palpitante junto al tuyo, palpar tu pecho desnudo y sentir tu respiración agitada y apresurada, llevándome de la locura al frenesí. Mis manos inquietas, mi cuerpo nervioso, en espera del mínimo roce de tu piel. Tu boca audaz y desafiante, tu mirada dulce y protectora, pequeñas caricias acompañadas de cálidas aguas que se deslizan y humedecen el punto exacto de mi piel. Te deseo, lujuria que me vuelve loca, febril y desafiante, para que lo puedas tomar, para que me puedas tener. Te deseo, en mis brazos, en mi cama. En mis sueños te anhelo y en los mismos me entrego a ti. Te deseo, libremente y con...
Comentarios
Publicar un comentario